Vortex a la nada, capítulo 1.

"No les prometo que permanecerán en mi memoria, pues el egoismo, distracción y cobardía nublan mi mente; pero tal vez entonces en la liberadora hora, en ese instante eterno en que caiga mi cuerpo sin vida sobre mi despacho vendrán a mi todos estos instantes, Beethoven, Chopin, Silva, Borges, las mujeres que amé, los lugares que conocí y por supuesto ustedes... entonces...en ese instante realmente seré libre, dejaré de ser un simple simio castigado por ídolos y finalmente Seré.... seré uno, seré uds, seré todos, seré eterno, seré Dios."